Mirad al cuerpo muerto
no palpita
no se siento a sí mismo
no se queja
Un cuervo
avanza solitario por su vientre
desconociendo
la función de la carroña
la función final de sus instintos
rechazando el negro augurio
de sus plumas
besa el pecho enternecido
oscuro
oscuro
porque este no es París
esto es Lima
y la muerte de un amigo no es gloriosa
pero sí tierna y llena de ignorancia
y la muerte es tanta
tanta que hasta los cuervos
necesitan un cuerpo para ser
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